En Diciembre de 2011, el gobierno español implementó un nuevo plan para corregir el déficit público.
Se trata de medidas en materia presupuestaria, tributaria y financiera para la corrección del déficit público e incluye un gravamen complementario en el IRPF.
El gravamen complementario al IRPF se verá aplicado durante 2012 y 2013 y se gravará tanto la base de liquidable de ahorro como la base liquidable general. Esto implica que se efectuará un aumento en el porcentaje de las retenciones de capital y trabajo.
El incremento del IRPF para rendimientos de trabajo entró en vigor el 1 de febrero del 2012. Este nuevo gravamen es progresivo. Varía en función de la base liquidable, desde un 0.75% para las rentas inferiores a 17 707 euros, hasta un 7% para aquellas que superan los 300 000 euros.
Las retenciones aplicables a rendimientos sujetos a los periodos impositivos del 2012 y 2013, se incrementará en un 2% (21% en lugar del 19% previo) para los rendimientos detallados en el siguiente cuadro:
El porcentaje de Retención también subirá desde el 35% hasta el 42% durante 2012 y 2013 para aquellas personas que reciban rendimiento como administradores o miembros de consejo de administración por ejemplo.
El Impuesto sobre Sociedades aumentará al 21% de retención o ingreso a la cuenta.
Con el objetivo de promover el emprendimiento y en el mismo tiempo facilitar el desarrollo de las microempresarios, se aplica un tipo de gravamen reducido por el mantenimiento y la creación de trabajo. En 2012 se aplicará un impuesto del 20% para empresas con una facturación hasta 300.000 euros.
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