¿Cómo emitir facturas a un cliente extranjero desde España?

Vender fuera del país es uno de los puntos de arranque más habituales de la expansión de un negocio. Si quieres llegar a ese nivel, el proceso de internacionalizar tu empresa es el camino a tomar. Para hacerlo de forma exitosa debes prestar atención a algunos aspectos, como el proceso de emitir facturas para clientes extranjeros. Por fortuna, en este post te contaremos todo lo que necesitas saber, ¡Acompáñanos! 

¿Cómo identificar y registrar a un cliente extranjero?

Se requiere un análisis aún más detallado al planificar una operación en el extranjero en comparación con la planificación de ventas y servicios dentro de tu país.

No es lo mismo emitir facturas para negocios pertenecientes a la Unión Europea que para aquellos que están fuera de ella. Este tipo de operaciones son consideradas como exportaciones. 

Cuando emites una factura, debes expresar el importe del IVA en euros y elegir cualquier lengua para transcribirla, aunque se recomienda una traducción a alguna de las lenguas oficiales españolas.

Es esencial que una de las dos partes partícipes en la operación esté dado de alta en el ROI (Registro de Operador Intracomunitario) en Hacienda a través del Modelo 036 para emitir facturas al extranjero desde España. Al obtener el NIF-Intracomunitario de IVA, podrás facturar a empresas de la Unión Europea. 

Pero, en concreto, ¿cuáles son las tres situaciones diferentes que pueden surgir al emitir facturas al extranjero desde España? 

1. Empresas de la UE
2. Clientes particulares de la UE
3. Empresas/particulares fuera de la UE

Dicho esto, a continuación te compartimos los aspectos clave para hacer este proceso mucho más eficiente: 

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¿Cómo es el proceso de emitir facturas para clientes extranjeros? 

En general, los elementos básicos para emitir facturas incluyen: información del emisor y receptor, número correlativo y fecha de emisión, concepto del producto o servicio, base imponible, impuestos y el total. Además, debe cumplir con ciertas reglas como la numeración correlativa cada año.

Ahora bien, para facturar en específico para cada una de las situaciones que nombramos anteriormente, se deben cumplir los siguientes 3 pasos:

1. Emitir facturas para clientes extranjeros de la Unión Europea

Si se facturan servicios o bienes a una empresa o profesional intracomunitario que esté dado de alta en el ROI, la factura irá exenta de IVA. Teniendo como excepción a los servicios incluidos en el artículo 70 de la Ley del IVA: como transporte, restauración y relacionados con inmuebles en España. 

Para estos casos habrá que presentar los mismos modelos tributarios, pero se aplicará la inversión en sujeto pasivo.

2. Emitir facturas para clientes particulares de la Unión Europea

En general, al emitir facturas de servicios para un cliente particular de la Unión Europea, se tributará el IVA en el país donde se encuentre el proveedor, que en este caso es España, y se tratará como cualquier transacción nacional.

Estas operaciones deben ser reportadas en el Modelo 303 y 349. Para facturar bienes a un cliente particular de la Unión Europea, se aplicará el mismo principio y se incluirá en los mismos modelos tributarios.

Además, existe un Régimen Especial que se aplica a las ventas a distancia (por ejemplo, ventas en línea) a clientes particulares dentro de la Unión Europea. Si el monto total de estas ventas no supera los 35.000 euros, se aplicará el IVA del país de origen de la venta, que en este caso es España.

Si las ventas superan este umbral, entonces se aplicará el IVA del país de destino de la venta (es decir, el país donde se encuentra el cliente).

3. Emitir facturas para clientes fuera de la Unión Europea

Para facturar exportaciones, en el caso de vender a una empresa, se debe facturar exento de IVA, no siendo necesario estar dado de alta en el ROI ni incluirlo en el Modelo 349, aunque se debe incluir en la casilla 60 de «información adicional» del Modelo 303.

Solo se necesita el Documento Único Administrativo (DUA) como exportador y añadir la nota «Artículo 21.1 de la Ley 37/1992» en las facturas. Si se venden a Canarias, se tributará de la misma manera que una exportación.

Si se factura una exportación de servicios a un cliente particular, se tributará el IVA del país de origen.

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¿Cuál es el cumplimiento fiscal en la emisión de facturas a un cliente extranjero?

Asegurarse de que la factura cumple con las normativas fiscales internacionales, evita el riesgo de tener que pagar impuestos dos veces y manejar adecuadamente la declaración fiscal. La retención de impuestos correspondientes son elementos clave a considerar. Veamos los distintos tipos de imposiciones que deben cumplirse al emitir facturas internacionales.

Impuestos indirectos

En el comercio internacional existen tres impuestos indirectos importantes a considerar:

• IVA: en la Unión Europea está armonizado, aunque en otros países existen tributos con funcionamiento diferente.
• Impuestos especiales: gravan solo algunos tipos de bienes, como hidrocarburos, bebidas alcohólicas, tabaco, entre otros.
• Aranceles: a pesar de la tendencia global a su reducción, aún se pagan en algunos casos.

Impuestos directos

En general, al emitir facturas,  el país de residencia paga los impuestos que gravan las rentas generadas por ventas o prestaciones de servicios internacionales.

Sin embargo, es posible que en el país de destino se deba pagar algún tributo similar al impuesto sobre la renta de los no residentes españoles, en cuyo caso se debe consultar lo que establece el convenio para evitar la doble imposición entre ambos países.

El cobro de la venta

Los pagos internacionales pueden ser complicados, especialmente en operaciones de elevado valor con clientes no habituales. Por ello, se puede considerar la incorporación de intermediarios al emitir facturas, así como establecer condiciones para la realización del pago y la entrega de los bienes o los documentos.

Operaciones físicas

Es importante definir quién realiza cada operación (comprador, vendedor o tercero), quién cubre los costes y quién cubre los riesgos.

En estos casos, se suele recurrir a incoterms. Estos estatutos establecen las condiciones de operaciones como la recogida en fábrica, los trámites aduaneros, el transporte terrestre y marítimo, la carga, la estiba, la descarga, la entrega en el lugar de destino, entre otros aspectos.

Valoración de riesgos

Las ventas entre distintos países tienen riesgos diferentes a las nacionales, por lo que es importante valorarlos antes de emprender cualquier transacción o emitir facturas. Algunos de los riesgos a considerar son cambiarios, impagos, algunos asociados al transporte, riesgos relacionados con decisiones soberanas de los estados o al entorno.

Factores digitales

En el comercio internacional, las comunicaciones suelen ser principalmente digitales. Por ello, se debe prestar atención a la normativa de cada país en cuestiones como certificados, firmas, claves, autenticación e identificación, protección de datos, derechos digitales y conocimiento de los clientes.

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Si necesita emitir facturas internacionales de forma rápida y precisa, no dude en buscar asesoramiento de expertos en la materia.

Contar con un equipo de profesionales que le guíe en el cumplimiento de todas las normativas legales puede ser la clave del éxito al emitir facturas y en todas sus operaciones internacionales. ¡No arriesgue su empresa y solicite una asesoría hoy mismo!